Cómo el BIM ha revolucionado el sector de la construcción

Estamos viviendo momentos especiales en la historia de la construcción gracias a BIM y al BIM Management. Se trata de una verdadera revolución. Desde que apareció en el sector, vemos los edificios de otra manera y se pueden conseguir proyectos de manera colaborativa y compartir experiencias aprendidas por las diferentes partes del proceso productivo.

¿En qué consiste el BIM Management?

La metodología del BIM Management implica la aplicación de los procesos de la Norma ISO 21500, enfocándolos en cada tipo de proyecto. Un ejemplo lo tenemos en Sach Consulting, que apuesta por una gestión eficiente de los procesos y una construcción sostenible de los edificios, tratando de minimizar el impacto ambiental. Se busca un uso eficiente de la energía a través una gestión integrada con modelo colaborativo en 3D.

Un elemento fundamental en la optimización de este tipo de metodología es la entrega integrada del proyecto o IPD (Integrated Project Delivery), que se diferencia del sistema tradicional de contratación por un acuerdo contractual mínimo entre cliente, constructor, equipo de diseño y gestión. Riesgos y recompensas se reparten entre todos. El éxito de todos depende del éxito del proyecto.

Los edificios tienen que ser eficientes en la gestión, pero también certificables. El cliente necesita conocer el grado de responsabilidad social que tienen las empresas en el desarrollo de proyectos. Para eso es necesario comprobar que se ha logrado un buen resultado medioambiental, cuidando también el aspecto social y económico.

La certificación LEED o la BREEAM garantizan los estándares de esta certificación y es la que da más reconocimiento global.

Ejemplo de construcción sostenible

Si tomamos como referencia el desarrollo del proyecto de una ampliación para una nave industrial, los parámetros que se tienen en cuenta a través del BIM Management son los siguientes:

• Utilizar materiales sostenibles.
• Gestionar correctamente los residuos. Índice de diversión superior a 75%.
• Iluminación con tecnología LED, que aporta más eficiente y dan menos calor.
• Climatización con equipos de última generación con coeficiente de eficiencia energética muy elevado y con gestión de calidad del aire con sistema VRV Free Cooling.
• División por plantas e instalaciones .
• Monitorización en la gestión de los consumos y eficiencia en las instalaciones
• Gestión de responsable del agua: equipos de griferías de bajo caudal y control de descargas en cisternas.
• Central inteligente de generación energética: genera conjuntamente electricidad y calor.

El BIM por tanto hace realidad una construcción más sostenible, siguiendo las directrices del ISO 21500 y una gestión más adecuada del proceso constructivo.